Las asistentes de dirección, no solamente se convirtieron en la mano derecha de CEO 's y directivos. Además, han pasado a desarrollar un rol clave en el funcionamiento y administración de las compañías, ofreciendo soluciones a los problemas, creatividad y dinamismo a los proyectos, y organización a la labores cotidianas. De modo que no es de extrañar la proliferación de la oferta de curso de secretaria de dirección existente.
Con el paso del tiempo, estas profesionales fueron cobrando cada día mayor protagonismo en los asuntos corporativos, pues dejaron de tener entre sus labores básicas redactar documentos, responder comunicaciones telefónicas y enviar faxes.
La asistente de dirección actual ya no sólo debe poseer los conocimientos básicos que el trabajo administrativo necesita, sino también características personales en donde quede de manifiesto su buen carácter, comportamiento y compromiso empresarial.
El papel de las secretarias de dirección hace que cada vez sea más importante la capacidad de dominar habilidades tan sencillas pero vitales, como el sentido común, la razón y el buen trato.
Toda secretaria de dirección tiene que presentar un conjunto de cualidades. Algunas se desarrollan con el tiempo, como construir relaciones de confianza e integridad con los superiores, pares y usuarios, y otras son fundamentales en esta ocupación, como la discreción, lealtad con la empresa y ser consecuente, estricta, dinámica, y emprendedora.
En cuanto a lo que más valoran los directivos de una asistente es su formación integral, ya sea académica como personal. Se trata de un todo. No solamente se fijan en competencias intelectuales o que tenga eficacia o autonomía, sino a su vez que posea empatía, calidez humana y cuente con buena presencia, puesto que , de alguna manera, son la cara de la organización.